Que Nos Merecemos

Texto: Angel Amigo Foto: dskciado//cc flickr

¿Qué haremos cuando nuestro razonamiento vague a la deriva enfermo?
¿O que nuestros pensamientos yerren exhaustos?
¿A quien le echaremos la culpa de los cuerpos desnutridos, de espíritu malíciento?
¿O a que le podemos pedir cuentas de nuestros desaciertos?

¿Cómo sobreviviremos a las consecuencias de nuestros errores?
¿O a las faltas, o a los malos actos cometidos?
¿Cómo dejamos que mueran los inocentes sin hacernos un reproche?
Y hacemos pasar hambre a los débiles cegando nuestros sentidos.

¿Que mal le hicimos a nuestros ancestros para inculcarnos tales valores?
¿Y qué meta perseguían, o qué razones esgrimieron?
Pesarosos caminamos aturdidos sintiéndonos pecadores.
Porque pensamos, que abstrayéndonos del significado olvidaremos por que así obraron.

Pobres desgraciados recorremos nuestras vidas como marionetas,
Siempre buscando culpables, a todas horas aludiendo errores ajenos.
¿Es que no escarmentamos? ¿O no nos cansamos de disculpas patéticas?
No, como autómatas asumimos la áspera ruta esperando que esas horas sean amenas.

Pues ignorándolas, es mas fácil recoger sus malas cosechas,
haciendo ojos ciegos creemos que no son nuestras penas.
Y así, en el transcurrir de nuestras vidas desechas,
deambulamos esperanzados pensando que quizá mañana sean mas buenas.

Porque los pesares de los desconocidos, de los extraños,
no nos pesan como la realidad que nos escondemos.
Y se nos hace mas fácil este vil pasar de los años,
mientras nos dirigimos como almas en pena, al destino que nos merecemos.